Durante la última sesión plenaria, el concejal del PSOE de San Miguel de Abona, José Carlos Rodríguez Rodríguez, presentó una moción en la que se solicitaba la realización de un informe para conocer el estado de conservación de la red de abastecimiento de agua potable del municipio para, posteriormente, iniciar la redacción y ejecución de los proyectos necesarios para la renovación de esta red en todas las zonas del municipio que así lo requieran.

La propuesta fue debatida en el último pleno y rechazada por el voto en contra de Coalición Canaria. Es por ello que, el concejal José Carlos Rodríguez Rodríguez, ha detallado que, “a pesar de que la empresa concesionaria (TAGUA), en el periodo 2020-2021, ha realizado un gran esfuerzo en la detección y reparación de estas fugas, logrando una reducción de 118.000m3 en un año, aún se están perdiendo 138.846m3 anuales, por lo tanto, esta situación requiere una visión municipal, más global, para resolver este problema”.

La Memoria del Servicio Municipal de Abasto Agua Potable de San Miguel de Abona 2020-2021, indica, en su gráfica de evolución de ahorro de agua, que aún existe una diferencia de 31.000 litros/hora. Parte de esta diferencia se debe a la precisión de los equipos medidores, pero también tienen mucho que ver las fugas existentes en la red de distribución de agua potable.

“Muchas de esas fugas se están produciendo en los edificios municipales”, así lo manifestó el alcalde en la comisión informativa previa al pleno, por lo tanto, el concejal Rodríguez sentenció “esta situación se agrava aún más”. “La fuga que el grupo de gobierno afirma que hay en los edificios municipales sí se están registrando y por lo tanto esa agua se está pagando”.

El informe de TAGUA especifica que la diferencia que existe se aprecia en la medida de los contadores que hay en la salida de los depósitos municipales y la suma de las medidas de todos los contadores de las personas abonadas al servicio, en total se están perdiendo 271.568m3 al año.

“Teniendo en cuenta que el precio medio del metro cúbicos es de 0,70 céntimos, estamos hablando que estamos pagando, de más, alrededor de 190.000 euros al año y ese importe económico no es asumido por la empresa concesionaria, ya que esas pÉrdidas están reflejadas en el pliego de contratación, esas pérdidas se están trasladando al precio que se nos cobra en el agua a los vecinos y vecinas de San Miguel de Abona que tenemos un suministro de agua potable contratado”, explicó el concejal socaialdemócrata José Carlos Rodríguez Rodríguez.

Es importante y necesario realizar este estudio y así comprobar la salud de la red de agua potable, eliminar las fugas de este bien escaso, mejorar el servicio e invertir los recursos públicos en las necesidades reales que tiene San Miguel de Abona.

“Si hiciéramos un esfuerzo en mejorar esas pérdidas, se podría regular el precio público del agua. Hoy en día hay tecnología más que suficiente para subsanar ese problema, lo que vemos es que no hay voluntad política para solucionarlo”, concluyó el edil socialista.